Las evidencias y los métodos de evaluación

Las evidencias del aprendizaje forman parte de todo el proceso formativo, educativo, de conocimientos y habilidades; en dicho proceso se realiza el acopio de información que va formando parte del portafolio de evaluación, los métodos que se utilizan puede ser la observación, mediante un conjunto de indicadores que se van checando o bien una lista de cotejo, que contenga que actitudes, que habilidades, que valores y que conocimientos desarrollará o construirá para su desmpeño personal y social e inclusive para continuar estudios en el nivel inmediato superior o en el sector productivo.

La obsevación es un método de evaluación que está presente en todas nuestras acciones educativas, en investigación etnográfica se considera una gran herramienta, así debe ser para los profesores, debemos desarrollar nuestra habilidad de observación, es un requisito para evaluar mejor.

La simulación es un gran método para evaluar los aprendizajes, las evidencias surgen en una lista de cotejo, que se construye desde la planeación por competencias, los indicadores deben estar muy claros y establecer acuerdo con los alumnos, para que después podamos practicar la coevaluación, autoevaluación y la heteroevaluación. A los alumnos les gusta exponer, hacer representaciones y poner ejemplos en sus procesos de aprendizaje, lo cual nos facilita las relaciones profesor-alumno y las acciones docentes; son más amenas las sesiones de clase.
Con la evaluación a través de proyectos o tareas, es muy importante establecer que evidencias presentarán, en que tiempos, en que formatos, el proyecto estará integrado en la planeación por competencias, poner líderes en los equipos de trabajo, entendiendo el liderazgo transaccional.
El tipo de líder mencionado, es el que se integra en el equipo como un miembro más y logra que todos los integrantes cumplan con sus obligaciones, todos van hacia la realización de la tarea como acción fundamental. Aquí es muy factible la coevaluación, la autoevaluación y la heteroevaluación. Cuando planeamos la evaluación de un proyecto, nos damos cuenta de que su realización permite el desarrollo de casi todas las competencias genéricas e inclusive las disciplinares, genera con mayor facilidad la construcción del conocimiento y el cambio de actitudes, desarrollo de habilidades, valores, etc...

Puntualizar: La evaluación forma parte del proceso de aprendizaje, es holística, flexible, demócratica, participativa, contextual, formativa y técnica. Hay que adaptar los métodos de evaluación, con el desarrollo de competencias genéricas y disciplinares, en el módulo básico y las profesionales en el otro módulo, las evidencias y niveles de desmpeño deben corresponder y contextualizarse.

La evaluación intenta definir los niveles de desempéño, sirve para corregir errores, para saber que podemos hacer mejor las cosas, para que reconozcamos el valor de la resiliencia y mantengamos en buenos niveles nuestra autoestima y vivir los fracasos como grandes experiencias.

Que disfruten conmigo estos aprendizajes, no importa que sea domingo.
Saludos y deseos de bienestar para todos.

Guadalupe Candia Torres.